CALENDARIO AZTECA

viernes, 25 de septiembre de 2009

Valladolid. Jueves.

Hoy es un día gris de esos que me encantan, y me recuerdan tanto a los jueves en la facultad…bueno Lidia qué, esta noche unos vinos…y gracias a algo, casi siempre decía que sí. Hoy la he echado de menos.


Tomarme un café con Elisabeth sería ahora algo que me encantaría. Ofrecerla un cigarro e ir a buscarla como siempre. Y como ya nunca más haré.


Natxo, como no le voy a echar de menos, aunque hace tanto ya que se fue. Pero me encantaría dar una vuelta con él.


Echo de menos las horas de cafetería con Rafa. Echo de menos los abrazos de la otra Lidia.

Hoy me he dado cuenta de que no echo de menos sólo Valladolid, y sus recuerdos. Echo tanto en falta a los que ya no están allí. Pero al pasear por sus calles mi memoria se activa y entonces les recuerdo a ellos. Todas esas horas tomando café, hablando, emborrachándonos y que siempre pensé que seguiría haciendo siempre. Siempre pensé que Lidia, Natxo o Elisa estarían cerca de mí en los momentos importantes de la vida. O en los tristes. O en todos.


Se fueron yendo uno tras otro, cada cual más lejos. Hasta que me acabe marchando yo.


Y ahora cada vez que tengo algo importante, tengo que hacer demasiadas llamadas. La verdad no importa que estén lejos o que haga muchos que no nos veamos. Cuando hablo con ellos los siento cerca. Y sé que mis recuerdos pasados no son lo importante, si no que lo importante son los recuerdos que nos quedan por vivir. Aunque sea en la distancia.

1 comentario:

Milady dijo...

Y eso es verdaderamente lo importante que por mucho que estén léjos los sientes muy cerca. Un besazo guapa.